España es un país ávido de medidas pro-conciliación que necesita como el comer una modernización en lo que a racionalización de horarios se refiere, un país que requiere de iniciativas concretas que faciliten la conciliación entre lo familiar y lo laboral para contribuir, a través de ello, a un aumento de la productividad y a una mejora en las condiciones de vida de sus habitantes. Así que nosotros nos hemos liado la manta a la cabeza y nos planteamos cinco medidas para la conciliación que serían muy útiles en este sentido, pero que el próximo Gobierno, con casi total seguridad, nunca tomará.
1. Medidas que fomenten la flexibilización horaria: España es uno de los países europeos con un mayor porcentaje de empleos sin flexibilidad horaria (88,2%). Estamos lejísimos, en ese aspecto, de la situación vigente en otros países más avanzados como Finlandia, donde sólo el 44% de los empleos tiene un horario totalmente fijado. La flexibilidad horaria facilita la conciliación a las familias. Y eso lo agradecen los empleados.
2. Aumento de los permisos de maternidad y paternidad: Una reivindicación que cada vez adquiere más fuerza. La ampliación del permiso de paternidad a un mes de duración lleva años aprobada, pero aún no ha sido aplicada. Aún así, se antoja corto. El permiso de maternidad sigue lejos de los seis meses de lactancia exclusiva que recomienda la OMS, y más lejos todavía de los que disfrutan las madres en otros países europeos.
3. Adelanto del prime-time televisivo y del horario de cierre de comercios: Que los comercios cierren a las 10 de la noche es una aberración, tanto para los empleados de esos comercios como para los clientes, aunque muchas veces éstos últimos no se den cuenta. Que los programas televisivos de prime-time empiecen a las 22:45 de la noche y acaben a las 1 de la madrugada, es otra perversión. ¿Qué tiene que ver esto con medidas para la conciliación? Mucho. Unos horarios más racionales nos permitirían un mejor descanso y un mayor aprovechamiento del tiempo.
4. Fomento y promoción del teletrabajo: Las bondades del teletrabajo están más que demostradas. Tanto para empresas como para empleados. Harían falta medidas políticas que fomentasen y promocionasen este tipo de empleo como una de las medidas para la conciliación.
5. Racionalización de horarios laborales: En esta, como en otras de las medidas que hemos comentado, hay que saber diferenciar. No todos los empleos son iguales. No todos pueden adoptar las mismas medidas. No obstante, en todos aquellos empleos en los que sea posible, sería positivo racionalizar los horarios laborales, acabar con esas jornadas maratonianas y sinsentido, desterrar las dos horas para comer, fomentar la productividad y no el presencialismo. Adoptar, en fin, unos horarios más acordes al entorno europeo en el que nos movemos.
¿Y vosotros? ¿Qué medidas para la conciliación añadiríais?