Redes Sociales Y Niños: La Importancia Del Buen Uso
Las nuevas tecnologías crecen con nuestros hijos. Evolucionan. Forman parte de nuestro día a día. Y, por supuesto, del suyo. Saber cómo controlar el acceso a esa tecnología es vital para su seguridad.
Y es que, pese a que nuestros hijos son nativos digitales no dejan de ser niños, por lo que debemos prestar mucha atención al uso que hacen de esa tecnología y, por ende, ayudarles a tomar conciencia de los peligros a los que nos enfrentamos si no hacemos un uso correcto de internet y las redes sociales. En definitiva, debemos enseñarles a ser responsables con el uso de las nuevas tecnologías.
Somos Su Espejo
No podemos enseñar a nuestros hijos la importancia de un buen uso de internet y las redes sociales si nosotros no hacemos lo mismo. Al fin y al cabo son nuestro reflejo y nosotros somos el espejo.
Invitarles a participar cuando nosotros estemos utilizando el ordenador es una forma genial de hacerles ver que utilizar el ordenador debe hacerse así, sin secretismo sin escondernos. A plena luz sin nada que ocultar. Y mostrarles como un buen uso del mismo puede ser de gran utilidad. ¿Cómo enseñarles esto? Dando ejemplo nosotros mismos: respetemos a otros en redes sociales, no insultemos jamás a nadie ni entremos en conflictos absurdos, no amenacemos (esto obvio para lo 2.0 pero también para lo 1.0), respetemos la privacidad de los demás evitando publicar fotos o vídeos de los demás sin su permiso, no agreguemos a personas que no conozcamos en nuestros perfiles de redes sociales y no incluyamos información relevante que pueda comprometernos. Por supuesto, debemos explicarles que en internet la gente no siempre es quien dice ser y que es fácil mentir por lo que deben tener cuidado con lo que nos dicen.
Acompañar e Informar
Leíamos hace tiempo que la edad media de los niños en redes sociales es de 8 años. ¡8! Sin duda, un dato que debe hacernos pensar si un niño de esa edad está preparado para entender los riesgos que entrañan un mal uso de las redes sociales.
La misión de los padres frente a la relación entre los hijos y las nuevas tecnologías debería ser la de acompañamiento. Un acompañamiento respetuoso pero que informe y forme a los menores sobre el buen uso de internet y las redes sociales. Pero antes debemos plantearnos muy en serio si nuestros hijos están preparados para adoptar tal responsabilidad.
Establecer unos límites de uso coherentes y seleccionar contenidos aptos en función de la edad del niño pueden ser dos herramientas estupendas para el buen uso de esa tecnología por parte de nuestros hijos. Por supuesto, también es importante que nuestros hijos puedan expresarse libremente ante nosotros. Sin miedos. Y la mejor forma de conseguirlo es respetarles siempre en sus procesos, sus tiempos e inquietudes.
